Cuidado del Lapislázuli: Guía para mantener su color

¡Felicidades por tu nueva pieza de lapislázuli! Esta hermosa piedra natural con su característico color azul intenso puede durar generaciones con el cuidado adecuado. Sigue estos sencillos consejos para evitar que tu lapislázuli pierda color:

Limpieza:

  • Evita productos químicos agresivos: No uses detergentes, jabones fuertes, lejía, amoníaco ni limpiadores de joyas comerciales. Estos productos pueden dañar la superficie de la piedra y opacar su brillo.
  • Paño suave: Para un brillo rápido, frota suavemente la piedra con un paño de microfibra o gamuza.

Exposición:

  • Evita la luz solar directa: La exposición prolongada al sol puede desvanecer el color del lapislázuli. Guarda tus joyas en un lugar fresco y oscuro cuando no las uses.
  • Evita el calor excesivo: No expongas la piedra a temperaturas extremas, como agua caliente o fuego. Esto puede debilitar la estructura de la piedra y causar que se agriete.
  • Cuidado con los golpes: El lapislázuli es una piedra relativamente frágil. Ten cuidado de no golpearla ni dejarla caer, ya que esto puede causar astillas o roturas.

Químicos:

  • Evita el contacto con perfumes, lociones y cosméticos: Los productos químicos en estos productos pueden manchar la piedra. Quítate las joyas antes de aplicarlos y asegúrate de que estén completamente secas antes de volver a ponértelas.
  • Evita el contacto con productos químicos domésticos: Ten cuidado con el cloro, lejía y otros productos de limpieza agresivos. Si la piedra entra en contacto con estos productos, enjuágala inmediatamente con agua limpia.

Consejos adicionales:

  • Guarda tus joyas de lapislázuli individualmente: Envuelve cada pieza en un paño suave o guárdala en un joyero compartimentado para evitar que se rayen.
  • Lleva tus joyas a un joyero profesional para una limpieza profunda anual.

Siguiendo estos consejos, podrás disfrutar de la belleza de tu lapislázuli durante muchos años.

La piedra de lapislázuli puede despinta por varias razones:

Exposición a la luz: La luz solar directa o la luz artificial intensa pueden desvanecer el color del lapislázuli con el tiempo. Se recomienda almacenar las piezas de lapislázuli en un lugar oscuro o con poca luz para evitar que se decoloren.

Exposición a productos químicos: El lapislázuli es sensible a ciertos productos químicos, como ácidos, detergentes y perfumes. El contacto con estos productos puede dañar el color de la piedra.

Fricción: El roce con otras piedras o superficies puede desgastar el color del lapislázuli. Se recomienda tener cuidado al manipular piezas de lapislázuli para evitar que se rayen o se desgasten.

Calor: El calor excesivo puede dañar el lapislázuli y hacer que pierda su color. Se recomienda evitar exponer las piezas de lapislázuli a fuentes de calor intenso, como el fuego o la luz solar directa.

Deterioro natural: El lapislázuli es una piedra natural y, como tal, puede sufrir un deterioro natural con el tiempo. Este deterioro puede incluir la pérdida de color.

Limpieza inadecuada: No se recomienda limpiar el lapislázuli con productos químicos agresivos o con agua caliente. Se debe limpiar con un paño suave.

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